CAMINO DE LAS LAGRIMAS

El duelo es el doloroso proceso normal de la elaboración 

de una pérdida, tendiente a la adaptación y armonización

 de nuestra situación interna y externa

frente a una nueva realidad.

Cuando se habla de duelo normalmente lo asociamos a la muerte de un ser querido, pero puede aplicarse cuando también cuando terminamos una relación, cuando perdemos la salud y a toda aquella situación que ya no es como antes, y se requiere trabajar en ese proceso para nuevamente ser felices. Y costará adaptarse a esta nueva realidad, y será difícil encontrar esa felicidad, porque para todo hay tiempo. Así como los árboles van creciendo poco a poco, y sus hermosas hojas se secan y caen al ir cambiando de estación, crecen unas nuevas, así justamente es la vida, pasan las estaciones, todos aquellos momentos de los cuales se aprendió algo, una situación dificil o la perdida de la salud y hay que adaptarnos, porque es lo más sano.

Aunque hay gente que no quiere adaptarse y que anhela ser como antes, vivir como antes y lo que no se ha dado cuenta es que ya no es como antes.

¿Y como me voy a adaptar en este nuevo momento? Eso mi estimado lector solo depende de ti. No antes, ni después, no cuando yo diga, ni cuando tu digas, sino cuando estés listo. Cuando hayas pasado por todo un proceso y estés en paz, contigo, con tu dolor y con toda tu vida.

Porque eso implica el madurar, el crecer, aceptar todos esos cambios en nuestra vida.

Es por ello que hablando particularmente de lo que trata este blog, el duelo trata de haber perdido la salud, trata también de todas esas recaídas y de todos esos golpes que durante la enfermedad nos vamos topando.

Siendo nuestra meta final el ser felices, lo ideal es ir encontrando nuevas formas de ver cada situación, de cambiar todas esas pruebas tan difíciles que día a día nos encontramos, y me refiero a cambiarlas ya sea por una sonrisa o también, por que no, por una lagrima, cuando ya no puedes mas, cuando el dolor se apodera de ti y no queda energía para sonreír y decir, estoy bien.

También se vale decir, hoy no puedo, hoy me siento mal y yo preciso descansar, porque mi cuerpo requiere descanso para poder renacer.

Yo no se tu, pero al menos a mi me ha llegado a abrazar la nostalgia cuando no puedo hacer lo que el día de hoy quiero. Salir al cine, salir y convivir con mis sobrinos, al llegar la noche salir a tomar una buena copa de algo, y a través de los días, los meses y los anos, fui dándome cuenta que mientras aceptaba mis limitaciones, podía darme el lujo de descansar y tener fuerza para otro día.

Justo en este momento recuerdo a los niños, tan maravillosos; disfrutan de las cosas pequeñas, a nuestro ver, de una manera increíble, sonríen una y otra vez, si se caen se levantan, si caen vuelven a levantarse y sonreír. Eso quiero hacer yo, caerme, levantarme, no importa si no sonrío, pero levantarme, que se que en una de esas caídas me levantare y sonreiré.

¿Por qué carambas se llama el camino de las lagrimas? Solo porque duele y sufrimos. Oh si, sufrimos cuando queremos que las cosas sean como ya no lo son. Sufrimos por anhelar un pasado que no existe, porque eso ya quedo atrás y también sufrimos porque anhelamos un futuro incierto o idealizado.

Disfruta el hoy, porque el mañana es muy incierto.

Ah y otra cosa más este camino se refiere a conectarnos con lo doloroso, ya tu iras descubriendo a que se refiere esta verdad.

En un siguiente artículo continuaré con este maravilloso escrito. Que tengan un hermoso día.